8M: Feminismo, Mujeres; Historia; Política

Por Andrea Fruttero.- Apuntes sobre el feminismo y otras yerbas.

“No se nace mujer, se llega a serlo” S. De Beauvoir. Simone de Beauvoir nació en 1908 y falleció en 1986 en París-Francia.

 Confieso que había leído algunos capítulos y fragmentos del libro “El segundo sexo” de Simone de Beauvoir en mis épocas de estudiante de periodismo, en esas ilegibles fotocopias a menor precio. El libro físico me llegó tarde –me refiero a mi edad- fue en esta navidad 2025 y el paquete llegó de manos de un caballero muy allegado, creo que no tenía la más mínima noción de lo que ponía en mis manos: LA BIBLIA DEL FEMINISMO. No pude parar de leer y tomar apuntes porque, la mina es un modelo de pensamiento de lenguaje; la pluma de Simone no hace más que confirmarme en cada punto seguido que es la mejor escritora del siglo pasado, (¿tal vez de este siglo, también?) la intelectual más brillante y esta vez es en serio: ¡una genial mujer!

¿Es una lectura obligada para todas las mujeres? Sí, debería serlo. Debería ser lectura obligada en la educación media y universitaria. Porque sigue siendo relevante y teniendo plena vigencia en el siglo XXI. Es y será una obra emblemática; considerada un referente de los movimientos feministas de la equidad de los 70.

Es una profunda reflexión en el papel sobre la mujer desde la perspectiva científica, histórica, psicológica, sociológica, ontológica y cultural.

Cuando Simone escribió este ensayo tenía cuarenta y un años y una vida intelectual plena.

Su compañero –ambos formaban parte de la corriente existencialista (la existencia antes que la esencia)- Sartre, la consideraba un genio y discutía solo con ella su pensamiento, toda la obra del brillante filósofo esta comentada, corregida y ampliada por ella.

¿Qué ocurría en aquella Francia de 1947, cuando Madame Beauvoir escribía su genial ensayo impulsada -tal vez- por el filósofo y amor de su vida Jean-Paul Sartre?

Las mujeres francesas habían obtenido el derecho a voto en 1945, pero no podían ser titulares de cuentas bancarias. Además, si una mujer trabajaba, su marido podía exigirle que dejara de hacerlo si consideraba que perjudicaba a la familia. El divorcio de mutuo acuerdo no existía; no se pensaba en el aborto, y la idea de la píldora o métodos anticonceptivos parecía de otra dimensión.

Francia se encontraba en un contexto político marcado por la elección del primer presidente de la *Cuarta República, las huelgas –la fábrica Renault- y la firma de los Tratados de Paris.  

El 10 de febrero de 1947, se ponía fin a las negociaciones para alcanzar la paz con la firma de los Tratados de París, entre los países vencedores de la Segunda Guerra Mundial y los países satélites de la Alemania nazi.

Continuaban las políticas de racionamiento y tuvieron que recurrir a Estados Unidos para obtener préstamos, uno de los objetivos era estabilizar económica y políticamente la Europa de la posguerra. El comunismo trataba de ejercer el poder dentro del Gobierno y al mismo tiempo oponerse a sus medidas por no ser suficientemente marxistas, en 1947 son expulsados del gobierno.

Causó un gran escándalo la publicación de El Segundo Sexo, por su crítica a la moral católica y por su naturalidad al abordar deseo femenino. Leído por algunos intelectuales de los años 50 aunque el furor ocurrió 20 años más tarde, cuando las mujeres se convirtieron en activistas en 1968, se sumaron a campañas, grupos clandestinos y a la militancia de izquierda.

Su frase: “No se nace mujer, se llega a serlo, significa que la femineidad es aprendida y que no existe una esencia natural.

El libro fue un rotundo éxito en ventas.

En el libro Simone se pregunta ¿qué es ser mujer? Y afirma que no existe coincidencia entre la identidad natural y la del género.

Tercera parte

Mitos

“La historia nos muestra que los hombres siempre han ejercido todos los poderes concretos; desde los primeros tiempos del patriarcado, han juzgado útil mantener a la mujer en un estado de dependencia; sus códigos se han establecido contra ella; y de ese modo la mujer se ha constituido concretamente como lo Otro. Esta condición servía a los intereses económicos de los varones; pero también convenía a sus pretensiones ontológicas y morales. Desde el que el sujeto busca afirmarse, lo Otro que lo limita y lo niega le es, no obstante, es necesario, pues no se alcanza sino a través de esa realidad que no es él. Por ese motivo, la vida del hombre no es jamás plenitud y reposo, es carencia y movimiento, lucha”.

Capitulo II

El punto de vista psicoanalítico.

A Freud no le preocupó mucho el destino de la mujer claro que calcó su descripción de la del destino masculino, algunos de cuyos rasgos se limitó a modificar”. “Freud supone que la mujer se siente un hombre mutilado: pero la idea de mutilación implica una comparación y una valoración;”

Capitulo V

De la madurez a la vejez.

La historia de la mujer –por el hecho de que ésta aún se halla encerrada en sus funciones de hembra- depende mucho más que la del hombre de su destino fisiológico; y la curva de ese destino es más accidentada, más discontinua que la curva masculina. Cada período de la existencia femenina es estacionario y monótono: pero el tránsito de un estadio a otro es de una peligrosa brutalidad; cada uno de esos tránsitos se revela por una crisis mucho más decisiva que en el varón: pubertad, iniciación sexual, menopausia. Mientras este último va envejeciendo paulatinamente, la mujer se ve bruscamente despojada de su femineidad; todavía es joven cuando pierde su atractivo erótico y la fecundidad, de donde, a los ojos de la sociedad y a los suyos propios, extraía la justificación de su existencia y sus oportunidades de felicidad…”

Cabe aclarar que estos textos fueron anteriores a 1949.-

Fuente: El Segundo Sexo, Simone De Beauvoir. Francia, 1947.

Editor: EM