Raúl Porchetto: «PORSUIGIECO fue una cofradía»
Entrevista de Edgardo Miller. -Figura pionera del rock argentino. Nacido un 15 de noviembre de 1949, en Mercedes, Buenos Aires.Su debut fue con su primer disco: ‘Cristo-Rock’.Con un estilo asequible, natural y llano grabó: “Che pibe, vení vota”, (disco de oro) 1982, que le otorgó un prestigio masivo e inesperado y se reflejó en “Reina madre” (1983), uno de los discos más vendidos del rock argentino. *Participó del famoso concierto “El Acusticazo”, editado como larga duración. Entre 1973 y 1975 formó una banda llamada “Reino de Munt” con Alejandro Lerner y Gustavo Bazterrica.En 1976 integró el fugaz grupo acústico ‘Porsuigieco” (Charly García y Lito Mestre.Con 47 años de trayectoria.‘Sombras en el cielo’, su última producción.Toca teclados, guitarra y voz.Grabó en los sellos: Microfón, Emi, Sazan, Interdisc RCA.
EM: Un músico legendario: Raúl Porchetto, ¡tantos años! que estoy en el rock y esta es la primera entrevista que te hago.
RP: ¡Bienvenido, entonces! Un placer.
EM: Imagino el placer que ha sido después de 10 años volver a grabar un disco.
RP: Casi, dos años me llevó la producción del disco. Estoy muy satisfecho con este trabajo, feliz de haberlo presentado en el Coliseo y de ahí empezar a soñar e imaginar que a la gente le va a gustar mucho.
EM: Hiciste muchos hit impresionantes tenés una gran carrera, sos un músico trascendente de la vieja guardia del rock, es un placer que regreses a grabar y toda esa gente que fue al Coliseo te va a seguir acompañando y la que te acompañaba antes también.
RP: La verdad es que anduvo bárbaro, volver a ver es a los amigos fue espectacular, más de lo imaginado. Para mí es importante arrancar con el pie derecho en este disco y estoy totalmente satisfecho.
EM: ¿Cuál es la temática de este nuevo disco?
RP: Se llama ‘Sombras en el cielo’ y tiene una temática variada. Uno va multiplicando experiencias corporales y emocionales en su vida. Cuando tenés buena señal con la vida, te podés comunicar. Cuando hay interferencia todo se complica. Este disco sintetiza todo lo que yo quiero decir, manejando la subjetividad y la paleta de colores similares a través de los años, tenía muchas ganas de decir y creo que en todas las letras hay un denominador común.
EM: ¿Qué músicos te acompañaron en este disco?
RP: Tuve como invitados a viejos amigos, más el aporte de la sangre nueva del rock. Está León Gieco, Juanse, Rolo Sartorio, La Beriso y Gabriel Pedernera, baterista de Eruca Sativa y los dos integrantes de Sui Generis.
Daniel Porchetto en teclado y voces, en coros Ana Clara Porchetto y Antonella Vinachia; el disco a su vez se co-produjo con Pablo Lozano
Es un disco más ‘rockerito’, busqué mejorar mi poesía, ser más concreto y contemporáneo. El aporte de Juanse, Rolo y León fueron fundamentales para el tema: ‘Nadie pide perdón’.
EM: Los “Porchetos” son tus hijos, imagino.
RP: Sí, Daniel y Ana Clara, mis dos hijos son músicos. Ana Clara es la que mejor canta de la familia (Risas) y Daniel, que también canta y hace teclados; yo estoy abocado a la guitarra, pero antes hacía teclados.
EM: Conozco toda tu trayectoria, desde Reino de Munt y soy un gran admirador de un tema tuyo que se llama: ‘Mercedes en silencio’, es una pieza de arte.
RP: Es un tema que quiero, adoro y aprecio, lo compuse para mi pueblo –Mercedes- Era un adolescente, creo que tenía 16 o 18 años, cuando escribí este tema.
EM: ¿Qué músicos te acompañaron en la presentación de ‘Sombras en el cielo?
RP: Además de los que ya te nombre más Adrian…., Rolo Sartorio, Rubén Casco. En la primera parte del show hicimos el disco completo y en la segunda, los clásicos. También actuó el Coro Kennedy; también participó mi querido amigo Nito Mestre.
EM: A propósito de Nito Mestre, Charly García y León Gieco con quién seguís muy conectado qué recordás de aquella gran experiencia que fue ‘Porsuigieco’.
RP: Mucho. Yo me di tremendo lujo de volver a tocar canciones que no tocaba desde el ’81 y fue un placer, junto a Gaby Pedernera en la batería.
Y volviendo a tu pregunta, Porsuigieco fue una cofradía de amigos, que somos lo que somos: músicos, poetas, y todo se plasmó en Porsuigieco. Volví a juntarlos después de 40 años en el Coliseo. Con una emoción terrible, siempre estamos juntos compartiendo la vida a través de la música y nuestras trayectorias.
EM: En los últimos diez años que estuviste sin grabar te dedicaste igual a la música, trabajando, presentándote con tus shows.
RP: Siempre, la música es mi lenguaje.
Si bien yo me alejé un poco durante unos años de lo exclusivamente profesional, pero la música siempre está, es parte de mi lenguaje, mi ADN de vida. Toque o no lo haga tanto, siempre está.
EM: Habría que hacerte un reconocimiento especial por “Che pibe, vení vota” ¡Qué buen tema!
RP: Che pibe, marcó toda una época; cuando escuchen el tema: Nunca nos piden perdón, es como la segunda parte de Che pibe, es mucho más duro. Es que han pasado muchas cosas y nunca nadie pide perdón, siempre nos piden los votos pero nunca nos piden perdón.
EM: Es que la música de rock siempre ha sido muy contestataria.
¿Qué recuerdo guardas de aquel Cristo Rock?
RP: Sí, fue en el ’72. Antes que lo olvide, tuve un invitado de lujo que fue Quique Parodi, del grupo Vudú de Rosario que es la nueva camada, a quienes invité a cantar en Cristo Rock. La obertura de Cristo Rock y la primera canción fueron totalmente locas para su época (CONFUSO), recuerdo que el productor me miró y me dijo: ‘si seguís haciendo esta música, no grabas más hasta que termine el contrato’. CONFUSO, D’Artagman Sarmiento.
EM: Lo recuerdo perfectamente, también a San Martín, y todos los pibes.
RP: También tengo que contarte que estuvo de invitado Leo García, con él hicimos el clásico ‘Noche y día’, me pareció bárbaro hacer una versión más pop de este tema y me regalé un momento fantástico.
EM: Podemos hablar horas y horas porque hemos transitado un mismo camino, yo desde el periodismo y vos desde la música. Es un placer para mí escuchar tantos nombres de músicos amigos, a propósito ¿cómo ves las nuevas generaciones de músicos en este pleno siglo XXI?
¿Se puede tomar parámetros con tus inicios en los ‘70?
RP: Sí y no. El país es totalmente diferente, hasta el mercado de la música es diferente; si alguien quiere usar la música como medio de vida e involucrarse en la industria es mucho más complicado, para un artista este mercado es fundamental. CONFUSO Sacas un disco y todavía no tengo claro donde coloco el producto, hoy en día con las redes sociales es un tema para hablarlo muy largo.
Mientras yo crecía ser mediático era Piazzola cerrando un programa de Tato Bores; un programa de entrevistas a Atahualpa Yupanqui, cantando en Feliz Domingo, esta era la gente que estaba en los medios, y vos mejor que nadie lo sabe porque dedicaste tu vida al periodismo y al rock.
Con Piazzola, recuerdo que comencé a pasar su música en la década de los ’70 cuando era ‘obligatorio’ pasar música nacional. Decidí poner Piazzola, ese disco impresionante que es Libertango, cuando regresó de Italia. Escuché y lo conocí personalmente a Astor, además no hay que olvidar que ellos son conocidos en el mundo.
Hablamos de este tema con Claudio Gabis (músico), y concluimos en que esa época tenía músicos pesados.
RP: Realmente escucharlos era un aporte sustancial, son como canciones sin melodía confuso, había una poesía y cierta coherencia, eran individuos preclaros. Todo ha cambiado, hoy veo un intento de resurgimiento, como un tratar de emerger desde ese lugar. Hubo un momento como en los ’90 el rock argentino, que en realidad era una proa, tuvo el caos que también tuvo el país o la dictadura que fue la oscuridad total.
Se salió de eso con mucho CONFUSO olor a tejo, por decirlo de alguna forma, y se confundió todo, esto no quiere decir que no hubo gente maravillosa que hizo cosas extraordinarias en los ’90 y en el 2000, pero –también- se ¿copió o confió? CONFUSO mucho y creo que era parte de la destrucción hacer todo una misma mezcla y debilitar esa proa, yo siempre dije desde el arranque del rock argentino que todos éramos traidores de la clase media, con todas las virtudes y contras. Había como una propuesta desde una vara muy alta y hoy pienso que se está tratando de recuperar la poesía –que no importa que diga lo que diga- pero recuperar la poesía, las texturas, el sonido, en un momento llegó a ser más importante el marketing: dar imagen de rockero o hacerse el rebelde way.
Ser músico en Argentina es como nadar en un pantano. No lo digo quejándome, pero uno nunca está esperando la Riviera Maya para navegar. (Risas) Todo a veces se hace muy confuso, demasiado exitista. Pareciera que son tiempos de deshonra y esto se ve claramente en las fantásticas manifestaciones del fútbol, de repente un día, gente de cierto nivel especializado, técnica y responsabilidad con audiencias de multitudes, que están diciendo que hay que colgar a Messi desde un mástil y echar a otro a patadas después viene –al otro día- diciendo ‘volvió el más grande’. Estas mismas contradicciones están en Sombras en el cielo, son tiempos poco honrosos, cuanto menos.
EM: Son panqueques, pienso lo mismo. Yo soy hincha de nuestra selección, futbolero a muerte y con concurrencia en la cancha, pero la mataron a la selección Argentina. Hay muchos intereses. Mucho dinero. Muchos periodistas que han viajado millones de kilómetros, la publicidad…digo, es muy cierto lo que decís, basta mirar la tele para darse cuenta como se niega la realidad: los 350 despidos de Télam nunca se publicaron en ningún espacio.
RP: Totalmente, esto se vio venir y me parece que CONFUSO
(Hablan de la posibilidad de que Porchetto toque en vivo en el programa)
EM: Te imaginas que por mi profesión de abogado viajo todas las semanas, a Mercedes, y esta es la razón por la que me gusta tanto Mercedes en silencio. Hace 28 años que hago el camino: General Rodríguez –donde vivo- hasta Mercedes y siempre me acuerdo de vos.
RP: Justamente en este nuevo disco hay un tema que hicimos con León que se llama: De Mercedes a Cañada Rosquín (Santa Fe) y que va relatando un poco en serio y otro poco en broma el circuito de dos amigos que llegan a Mercedes a la casa de mis padres, cantan y de ahí a Cañada, el pueblo de León. Es un tema muy de ruta y muy divertido.
EM: Yo tuve el placer de ser cercano a León. Cuando él vivía en Palomar (Ciudad Jardín) tomábamos juntos el trencito de Urquiza y de Urquiza a Chacarita charlando todo el viaje. Tengo muy buenos recuerdos de él, como ese día en que hicimos –para mí un enorme golpe de publicidad- un programa radial con: Willy Gardi, Ara Tokatlian, León…lo músicos de la época.
Entrevista realizada en el Programa «Hora Cero a puro Rock.
Desgrabación: Andrea Fruttero

