Denuncian que Marcela Acuña, esposa de Emerenciano Sena, amenazó a los fiscales de la causa Strzyzowski: «Vayan a la escuela de sus hijos»

La dirigente habría bajado órdenes para la militancia a través de un llamado desde la cárcel.

Desde la cárcel, a través de una llamada telefónica con una persona de su extrema confianza, la dirigente piquetera Marcela Acuña, esposa de Emerenciano Sena, habría bajado órdenes para que sus militantes hagan un seguimiento de los hijos de los fiscales de la causa que investiga el caso del femicidio de su nuera, Cecilia Strzyzowski.

«Vayan a las escuelas a las que asisten para que sepan lo que se siente que le toquen un hijo», es la orden que transmitió Acuña, según el informe policial que llegó a manos del Equipo Fiscal Especial.

De acuerdo a la denuncia que fue reproducida por Diario Norte, Acuña le bajó este mensaje a Carolina Sena, una de sus sobrinas, a través de un llamado telefónico que tuvo lugar cerca de las 8:50 del viernes. La dirigente piquetera, alojada en la Comisaría Sexta de Resistencia, no tiene teléfono pero se lo pidió a una custodio del establecimiento donde está detenida.

En una charla que duró aproximadamente 14 minutos, Acuña pidió a la sobrina, una persona de su extrema confianza, que le haga un listado del personal policial que trabaja en la Comisaría Tercera Metropolitana. Es que allí estuvo alojado su hijo, César Sena, pareja de Strzyzowski y principal apuntado por el crimen.

Según sostiene la piquetera, su hijo había sido «hostigado» por el personal policial de aquel destacamento. Sostiene que fue «torturado y picaneado». Es por eso que planea armar un operativo para pagarles con la misma moneda.

En la comunicación, que fue escuchada por una policía, Acuña habría dado la orden de conformar un grupo de personas que se dirijan a la casa del fiscal Jorge Cáceres Olivera, principal responsable de la investigación, aunque no precisó fecha ni hora de la movilización.

También ordenó apuntar contra un «un juez», aunque no especificó cual. La sospecha es que sería el juez de Garantías Héctor Sandoval, que fue quien confirmó las prisiones preventivas para ella y todo el clan.

En esa misma orden, Acuña bajó línea para «designar personas para que vayan a las escuelas a las que asisten» los hijos de los fiscales y otros dos empleados policiales. «Que sepan lo que se siente que le toquen un hijo», afirma el textual.

Carolina Sena, quien recibió la llamada, es una persona de extrema confianza de Acuña. Había sido candidata a primera concejal por la ciudad de Barranqueras en la lista que encabezaba Sena para las PASO de este año. Era además una de las personas que tenían autorización para visitar a la líder piquetera.

El sábado pasado había intentado pasarle un pan dulce que escondía adentro dos pastillas de clonazepam pero la descubrieron en la requisa. A partir de esta situación, se le quitó la visita a Acuña.

Desde el entorno de la dirigente afirman que no estaban al tanto ni les dieron pruebas de las «supuestas amenazas», pero que los notificaron de la revocación de la autorización de Carolina para visitar a su tía. También le sacaron la llamada telefónica diaria que Acuña tenía.

Emerenciano, Marcela César venían reclamando ante la justicia que les permitan llevar adelante una revinculación y poder verse nuevamente. Desde que fueron detenidos se les prohibió todo tipo de comunicación entre ellos.

No es la primera vez que los Sena hacen amenazas desde la cárcel. Emerenciano Sena había bajado una orden a su militancia para que se movilicen por las calles de Resistencia en los días previos a las audiencias que debían definir la libertad de los siete detenidos. Fue a través de un audio que se filtró y llegó a la prensa local.

Ante esta última amenaza, el elector gobernador de Chaco, Leandro Zdero, salió a pedir que se actúe con firmeza: «Que Marcela Acuña amenace a jueces y fiscales y a sus familias es de enorme gravedad institucional. Este hecho debe ser investigado. Basta de atropellos. El Chaco ya dijo basta», publicó en X.

También los jueces del Superior Tribunal de Justicia se solidarizaron con los fiscales, que presentaron una denuncia el viernes por las amenazas. El máximo tribunal convocó a «la paz social tan necesaria para el fortalecimiento de nuestra república democrática y el Estado Constitucional de Derecho», a través de un comunicado.

A casi cinco meses del femicidio de Strzyzowski, esta semana se realizó una nueva tanda de peritajes en la chanchería del campo Rossi, donde se cree que fue incinerado el cuerpo de la joven.

Allí encontraron 13 nuevas muestras de lo que podrían ser restos óseos, junto a cuatro elementos metálicos similares a tachuelas.

Aparecieron en una zona conocida como «quemazón», un punto que había sido señalado por Gustavo Obregón (uno de los acusados por encubrimiento) en su indagatoria.

*Fuente Clarín / AGP